El comienzo del proyecto
En verano de 2017 tuvo lugar el Encuentro Internacional de Sudáfrica de los colegios IBVM y CJ de todo el mundo. En él, nos planteamos diferentes cuestiones: ¿Se han preocupado los colegios de educar al alumnado según las nuevas normas sociales? ¿Se han preocupado de formarlos en el uso responsable de la tecnología? ¿Se han preocupado de formar su espíritu crítico ante esta avalancha de datos y fuentes? ¿Se han preocupado de fomentar el trabajo y la colaboración que estos nuevos medios permiten?
Esto es crucial porque el mundo que rodea a nuestro alumnado es digital y el futuro que les espera también lo es.
Un colegio con el espíritu de Mary Ward desarrolla formas sensibles y eficaces que permitan a la juventud participar con seguridad y ética en los medios sociales y en la tecnología emergente. Esto garantiza unas relaciones íntegras, al tiempo que aumenta las oportunidades para el aprendizaje y la creación de ciudadanos/as globales y digitales.
Creemos que el uso de la tecnología es una gran oportunidad en el ámbito educativo y no solo una demanda social sino ya una obligación legal. Por ello, llevamos muchos años desarrollando acciones relacionadas con este tema:
- Metodología Flipped Classroom, que permite realizar las actividades en clase y aclarar dudas, dejando para casa la mayor carga del contenido expositivo de las sesiones.
- Cultivar la Competencia Digital del alumnado, que ya nos piden, y puede ser desarrollada para facilitar la dinámica de trabajo de cada materia.
- Formación y acompañamiento en el uso de las nuevas tecnologías, trabajando el uso responsable y seguro en la red.
- Se abren los centros a las familias, nos incorporamos a su cotidianidad, les enseñamos lo que hacemos.
Pero, tras analizar las realidades de los Colegios IBVM y CJ de todo el mundo, pudimos descubrir lo necesario que era desarrollar un proyecto vertebrador que nos permita cumplir nuestros principios educativos de la mejor forma posible. Un proyecto que nos ayude a formar agentes de cambio social, ciudadanos con capacidad de análisis crítico ante el desafío que supone la tecnología y la inteligencia artificial.
Esta apuesta de presente repercutirá positivamente en el aprendizaje del alumnado, en la mejora de la práctica docente, en los procesos de gestión y en la satisfacción de las familias.
La afectividad, la empatía, el mirar a los ojos, el corazón y la vocación del maestro siempre han sido y serán nuestro punto más fuerte, pero esto no significa que el uso de la tecnología nos vaya a privar de la pasión docente. Todo lo contrario: vamos a ser capaces de atender al alumnado más y mejor, pues son el verdadero centro de nuestra misión educativa.
Y no se trata de empezar desde cero sino de usar lo bueno que ya existe, adaptarlo a nuestras necesidades y de ir creando, por el camino, todo aquello que nos sea necesario.
No nos quedamos en lo mínimo
Este proyecto no consiste en incidir solamente en algunos de estos puntos:
- entregar Chromebooks a los alumnos y los profesores.
- “educar” al alumnado y ayudarles en su proceso de creación de Identidad Digital.
- hacer que nuestros profesores desarrollen a fondo su competencia digital.
- incorporar el modelo de flipped classroom a todo lo que hagamos.
- usar la Realidad Virtual y la Realidad aumentada para consumir contenidos.
- dotar a los centros de sistemas más eficaces de gestión y comunicación con las familias.
- tener disponible la información para las familias de todo en todo momento.
- etc.
Un colegio con el espíritu de Mary Ward discierne qué cambios están sucediendo o son necesarios, y alienta el trabajo colaborativo para aceptar los cambios, a fin de llevar adelante el propósito de Dios a través de la educación.
Un proyecto integral
Este proyecto se basa en la imbricación de todos los puntos anteriores, las buenas prácticas y el estilo de enseñanza que nos distinguen como colegios BVM.
Todo lo anteriormente dicho solo será posible si tenemos claros cuáles son los ejes que van sostener y hacer avanzar nuestro proyecto.
Eje 1. Alumnado
- Su motivación aumenta cuando experimenta el uso de la tecnología en su trabajo diario.
- Puede convertirse a través del trabajo cooperativo en el profesor de un igual.
- Les permite que la autoevaluación y la coevaluación sean ágiles y con feedback inmediato.
- El ABP y el TBL nos ayudarán a desarrollar su competencia digital a la hora de trabajar en equipo, desarrollar ideas, analizar críticamente lo que se les ofrece.
- Los Proyectos de Aprendizaje Servicio, como el de los alumnos que forman/informan a otros en los buenos usos de la red, desarrollarán en todos más competencia digital.
- Mejora la atención a la diversidad.
Eje 2. Profesorado
- La institución debe cuidar y apoyar a los docentes, ya que lidian a diario con diferentes retos y mucho trabajo, y añadir algo más puede causar una gran sensación de agobio.
- El cambio en las actitudes (a través del acompañamiento formativo) motivará el cambio en las aptitudes, les ayudará a sentirse preparados y con ganas.
- La distribución, recopilación y evaluación de materiales se puede automatizar, dejando así más tiempo para la atención directa al alumnado.
- Los procesos de evaluación, autoevaluación y coevaluación también se automatizan.
Eje 3. Familias
- Queremos estar más cerca de nuestras familias, nos podemos incorporar a su cotidianidad, les involucramos activamente en el proceso de enseñanza aprendizaje, ven las puertas del aula abiertas, les mostramos/demostramos todo lo que hacemos.
- Se sienten más tranquilas porque ven que la escuela ya no solo se dedica a impartir conocimiento, sino que les educa en el uso responsable de la tecnología, y las familias también aprenden con ello.
- Facilita la comunicación y el intercambio de información entre todos, el proceso de aprendizaje de cada alumno puede ser transmitido de manera pormenorizada y automatizada a las familias.
Eje 4. Colegios
- Deben dotarse de los recursos necesarios:
- Infraestructuras de red
- Dispositivos a disposición o propios del alumnado
- Formación para el profesorado tanto en el manejo del área tecnológica (uso de G-Suite) como del área pedagógica.
- El intercambio de información, el acceso a la misma, la optimización de los recursos entre varios centros.
- El cumplimiento de la legalidad vigente en cuanto al uso de los medios tecnológicos y la obtención de distintas certificaciones de Google (no como un fin en sí mismo).
- Gestión escolar.
- La integración de las tecnologías con la innovación educativa que ya llevamos a cabo potenciará la calidad educativa de nuestros colegios y se podrá convertir en un aspecto diferenciador.
Manos a la obra
Todo esto nos impulsa a desarrollar un proyecto ambicioso, laborioso y emocionante, en el que entran en juego todos los miembros de nuestra Comunidad Educativa. Con él, los Colegios de la Fundación Educativa Mary Ward queremos seguir creciendo para dotar a nuestro alumnado de la mejor educación posible, siendo conscientes del tiempo en el que vivimos y las necesidades de nuestro mundo. Por eso seguimos aprendiendo.
Por eso somos Ciudadanos Digitales.